Desde el área
de Senasa en la capital Federal, trabajadora/es del organismo reclamaron soluciones
de fondo e inclusivas en un plan integral para el manejo de la crisis y
recuperación de tareas indelegables del Estado.
Esto pedido
se centra en la necedad del control de enfermedades en resguardo de la salud
pública (la vacuna principal a resguardar es el alimento sano, seguro y
soberano) y el Servicio para la reactivación económica y productiva en todas
las regiones del país.
En ese
sentido la sectorial reclamó un plan de 5 puntos:
1 –
Equiparación salarial para todas y todos los trabajadores del Senasa con
organismos con tareas equivalentes en el Estado. Recuperación de puestos de
trabajo y tareas sumamente necesarias en la reactivación productiva en la
"nueva normalidad"
2- Turnos
rotativos con menos horas de trabajo a igual salario – confección del Registro
de Reserva ante el avance de los contagios para posibilidades laborales y
operativas que no detengan el Servicio Sanitario.
3-
Inspecciones institucionales y gremiales para garantizar el cumplimiento de los
protocolos de bioseguridad en todos los sectores de trabajo – no alcanza con el
resguardo jurídico para cubrirse ante las negligencias del sector privado,
mientras los trabajadores y trabajadoras siguen expuestos a riesgosas
condiciones de trabajo.
4- El
teletrabajo no está regulado laboralmente, necesitamos urgente los protocolos
para la vuelta al trabajo y el reconocimiento de las condiciones laborales en
las que se está trabajando en ámbitos domésticos.
Por ello
piden urgente una política activa con la herramienta de la Escuela Infantil
para apoyo a las trabajadoras y trabajadores en su necesario acompañamiento a
nuestras hijas e hijos, para la concientización de la situación, herramientas
para resolución de problemas y rotación en las tares de trabajo y cuidado
intra-familiar según las probabilidades de cada familia y la solidaridad
Comunitaria-Senasa.
5-Plan
integral de manejo de crisis – no al voluntarismo segmentado que genera más
temores, discordia, dispersión y competencias individuales que generan
inestabilidad entre la compacta unidad de solidaridad y acción que se necesita
entre todo el cuerpo de trabajadores y trabajadoras esenciales en Senasa.