El
4 de noviembre pasado algo cambió. Miles de personas en representación de
comunidades originarias de todo el país, campesinos pobres, pequeños
agricultores, trabajadores del Estado y organizaciones sociales exigieron en
Plaza de Mayo la intervención del Ministerio de Agroindustria a favor suyo y no
de los monopolios exportadores y terratenientes.
Demandaron
acceso a la tierra y semillas, créditos para adquirir elementos de producción,
regulación en los precios de productos y en la cadena comercialización. Desde
entonces se abrió una instancia de diálogo con funcionarios de distintos
organismos. Durante las primeras dos reuniones no asistió ninguna autoridad del
Ministerio de Agroindustria, aunque para hoy -el tercer encuentro pautado-
comprometieron hacerlo.
“Aquel
viernes de noviembre fue producto de una primera reunión multisectorial en ATE.
Fue un paso estratégico, porque el Estado nunca va a juntar a todos los actores
del campesinado. Unirnos fue un hecho de calidad diferente”, dijo Amancay
Ardura de la CCC, minutos antes de salir desde la sede de ATE al encuentro con
autoridades del ministerio.
Durante
la previa estuvieron también representantes de la Federación Nacional Campesina
de distintas provincias, el Movimiento Originarios en Lucha, tareferos de
Misiones, trabajadores de SENASA, Agricultura Familiar e INTA.
“Para
nosotros es una enorme responsabilidad unir las luchas en tiempos en los que
comienza a haber hambre en el campo y se propagan enfermedades”, expresó Silva
León, Secretaria de Organización de ATE, quien adelantó que durante marzo y
abril la multisectorial confluirá en protestas en diversas ciudades de la
Argentina.
En
ellas no sólo reclamarán demandas transversales, sino también sectoriales que
inciden en las causas comunes. Daniel Gómez, delegado de ATE en la Secretaría
de Agricultura Familiar de Neuquén, precisó que la patronal no cumplió todavía
con la sentencia firme en la Justicia a favor de la reincorporación de los
trabajadores despedidos en Jujuy y mantiene cesantes a más de 50 personas. “Por
otro lado, no se viene implementado ninguna política. Estamos ejecutando
proyectos de 2016. Miles de personas reclaman nuestra intervención”, agregó.
Gustavo
Montiveros, trabajador de SENASA y Secretario Adjunto ATE Ezeiza, relató por su
lado que el organismo pretende evitar el control de cargas sobre la exportación
de granos en los puertos y automatizar en los productores funciones que debe
realizar un técnico del SENASA.