En el día de ayer se realizó un plenario virtual de
Asistentes Escolares, con alrededor de 300 participantes. Se escucharon los
múltiples reclamos del sector y este miércoles se presentaron diversas notas.
El encuentro dio inicio con un sentido homenaje a la
compañera Nancy Quintana, asistente escolar, referente de ATE Rosario,
integrante de la Junta Electoral, feminista, fallecida el 13 de octubre.
Continúo con la escucha de todas las voces y reclamos del sector.
Se definió por votación realizar una concentración,
con distanciamiento social, frente al Ministerio de Educación con el siguiente
pliego reivindicativo: salarios dignos, equiparación salarial con otros
ministerios, fondo de emergencia para todos los reemplazantes que son alrededor
de 11 mil en toda la provincia, protocolos con participación de lxs
trabajadorxs para afrontar la pandemia, creación de cargos y que se pongan fechas
para inscripciones para asistentes escolares ya que debían ser los primeros
días hábiles de octubre.
El gobierno de Omar Perotti negoció salarios en plena
pandemia, en connivencia con las direcciones provinciales de los gremios
estatales, a espaldas de las y lostrabajadores. La preocupación, el enojo y la
bronca fueron expresadas en el encuentro virtual. Entre las primeras palabras
que se escucharon estuvo esta frase: “estamos dejando la salud en las escuelas
por un sueldo de miseria”.
Lorena Almirón, Secretaria General de ATE Rosario,
planteó que “ponemos todos los días el cuerpo, somos esenciales pero no para
reconocernos condiciones de trabajo, elementos de protección y limpieza, como
los barbijos. Hay escuelas donde hasta falta el agua, elemental para evitar
contagios de COVID. Pretendían empezar las clases con 130 escuelas que no
estaban en condiciones”.
El último golpe contra trabajadores fue la adhesión de
la provincia a la Ley Nacional 27.348 de ART, impulsada por el macrismo y
levantada por un amplio espectro partidario santafesino (sectores del PJ, la
UCR, el Frente Progresista). La misma obstaculiza el acceso a la justicia y a
una reparación adecuada tras sufrir una enfermedad o accidente laboral. “Es una
maniobra política antiobrera, el gobierno no se cansa de pegarnos”, analizó
Almirón.
En una situación grave de crisis sanitaria y de
incertidumbre, las y los asistentes escolares manifestaron que los invitaron a
limpiar las escuelas que llevaban cuatro meses cerradas y, después, los
llamaron a una capacitación que, a la hora de su ejecución, fueron llevadas a
cabo por los sindicatos, siendo que debe ser garantizada por el gobierno.
Otra preocupación del sector que cuenta con una
paritaria 0 %, fue la vinculada con la obra social IAPOS ya que sus
prestaciones son cada vez más caras para el bolsillo. Además se suma el
conflicto suscitado entre la antes nombrada y la Asociación Odontológica de
Rosario que llevó a la suspensión de las autorizaciones 0106 de Covid. En ambas
situaciones las y los estatales ven truncado su derecho al acceso a la salud.
Por otro lado, en el concurrido encuentro, el afiliado
y asesor de ATE Rosario, Javier Bolmaro, explicó los alcances del Decreto Nº
1177 firmado por el gobernador Perotti, que dispone la asistencia económica para
docentes y asistentes escolares reemplazantes a un total de 3.500 docentes y
1.500 asistentes escolares suplentes que no hayan prestado servicios en 2020
y se encuentren en los primeros cinco
lugares del escalafón. Una definición, a todas luces, insuficiente.
Las y los asistentes escolares formularon diversas
preguntas en torno a la continuidad laboral en pandemia, cómo será la vuelta a
clases, qué políticas tendrá el gobierno con respecto a la antigüedad de las y
los trabajadores. Además acordaron llevar
junto al propio pliego reivindicativo al Ministerio de Educación el reclamo de
bolsones con alimentos nutricionales para las y los niños de los barrios. “A
veces nos da vergüenza lo que le entregamos a las familias”, dijo una
compañera.