La jueza de Garantías María Eugenia Gadano sobreseyó
definitivamente a Rodolfo Aguiar en la causa que buscó criminalizar la protesta
que encabezó el 19 de diciembre de 2016 frente a la municipalidad de General Roca.
De esta manera, se pone punto final al largo proceso de
persecución política y judicial contra el dirigente en la provincia. Esta es la
última causa de Aguiar en el fuero ordinario.
“Hoy se cayó la mentira: no pudieron probar en ocho años
ninguna de las acusaciones que nos realizaron”, señaló Rodolfo Aguiar. “Queda
más claro que nunca que intentan infundirnos miedo, pero no tenemos que temer:
luchar no es delito”, agregó.
“Esta sentencia nos da la razón cuando decimos que la
Justicia adicta al poder político instrumenta causas para condicionar la
libertad de reclamar que tenemos los trabajadores”, fustigó Rodolfo Aguiar.
El secretario adjunto de ATE nacional y titular de la CTA
Autónoma de Río Negro se había movilizado para entregar a las autoridades un petitorio,
en el marco de un paro de la central obrera. La respuesta fue una ensañada
represión que ejerció el ejército de policías presente.
La Justicia cómplice del poder político buscó criminalizar
la acción gremial: la fiscal Julieta Villa pidió la condena de Aguiar por el
delito de daño agravado y atentado y resistencia a la autoridad agravado.
Por supuesto, la orfandad probatoria permitió a la defensora
de la CTA Autónoma, Ailén Roca, solicitar el sobreseimiento que posteriormente
fue concedido.