“La
resolución del Consejo Directivo Nacional está enmarcada en su potestad, y
asimismo legitimada por el último Consejo Federal, con el objetivo de
descentralizar la estructura de los consejos provinciales para dotar de mayor
estructura a la territorialidad del sindicato”, explicó a El Trabajador del
Estado Silvia León.
Santa
Fe es un ejemplo del poder económico y político que centraliza el Consejo
provincial, del que dependen 14 mil de los 25 mil afiliados. Varias son las
localidades que superan los 250 afiliados y podrían ser seccionales, tal como
indica el estatuto de ATE.
“En
la depuración de padrones de San Justo, se advirtió que no se reunió la
cantidad mínima de afiliados, por lo que el Consejo Directivo Nacional decidió
no dar marcha atrás con la decisión soberana de los afiliados, pero sí de
institucionalizar a los delegados normalizadores Daniel Cenzón y Dora Schmets,
quienes tendrán a su cargo la tarea de afiliar el cupo restante”, informó la
Secretaria de Organización.
La
nueva seccional se compone en mayor parte de trabajadores del Estado
provincial. Sin embargo, uno de los principales roles de los compañeros
normalizadores será organizar a los trabajadores municipales, “tarea sobre la
que el Secretario General Hofmann desistió a lo largo de estos años”, precisó
la dirigente.
En
los próximos días, la flamante seccional de Venado Tuerto elegirá a sus nuevas
autoridades. De igual modo se espera que otras localidades también adopten la
decisión política de autonomía.