Los gremios rechazan de plano que se recorte la mayor dedicación y amenazan con ir a la Justicia si el Gobierno lo intenta. Advierten que sería necesario rediscutir la jornada laboral, llevando la carga horaria de 5 a 7 horas diarias.
Raquel Blas, Secretaria General del Consejo Directivo Provincial de ATE en Mendoza, advirtió que si el Gobierno decide dar de baja a una de esas extensiones horarias deberá hacerlo a través de un decreto, el que inmediatamente será llevado a la Justicia por inconstitucional. Para la dirigente, no se puede dar de baja con un decreto lo que fue ratificado por una ley. “Es antijurídico, impracticable y ha sido ratificado por una ley que homologa un acuerdo paritario”, consideró Blas, que advirtió que no dejarán pasar la idea.
Blas también dijo: “Evidentemente el 18 por ciento desde ya está rechazado absolutamente, esto que fue anticipado por el Gobierno generó mucho malestar entre los trabajadores y diría que el número correcto está más cerca del 30 que otra cosa. La expectativa tiene que ver con poder discutir con el Gobierno cuál es el salario real que tiene que tener un trabajador para enfrentar la canasta familiar. Por eso por ahí hablar de porcentajes es complejo por la desigualdad salarial que hay en los sueldos de los estatales en general”.
“La discusión municipal arranca el dos de febrero. Todos los municipales, o alrededor del 80 por ciento de ellos, tienen salarios por debajo del mínimo vital y móvil, rondado un promedio de 1.300 pesos y con asignaciones familiares cuyo máximo son 100 pesos por hijo. La mayor desigualdad se da en ese sector, por lo que veremos qué definen los compañeros antes del dos febrero cuando comience la discusión”, aseguró Blas, quien además dijo: “El resto de las discusiones arrancan en marzo, tanto salud, como la administración central como los otros sectores son quienes finalmente pondrán el porcentaje que pedirán en la mesa paritaria”.
30/01/2012