La Coordinación Nacional de la ATE ANAC encabezó una asamblea en el CIPE, de la que participaron también compañeros/as del interior y que se encuentran de licencia, para analizar y debatir la política que la ANAC ha dejado expuesta de manera clara con respecto al Centro y por la cual pretende que el CIPE solo capacite al personal externo, dejando la capacitación del personal ANAC y los cursos «internos» para una estructura paralela del Departamento Capacitación.
Para la Coordinación pone a esta a la misma altura con el CIPE y sus 65 años de experiencia y posicionamiento en la región y el mundo en la materia aeronáutica.
Según se explaya en su explicación el sector “un programa de capacitación para el personal de la ANAC, que excluye al CIPE pero incluye proveedores externos de capacitación, una clonación de contenidos de la plataforma virtual de cursos, la autorización a escuelas a dictar cursos que hasta el año pasado eran exclusividad del CIPE ANAC, la desinversión en materia edilicia, el no financiamiento para materiales didácticos, la falta de apoyo en proyectos como el mes de jornadas por el aniversario, la excesiva demora en la aprobación de aranceles y planificación de cursos anuales, la no solución de la gran falta de personal, la demora casi eterna en el pago de horas docentes, el no pago (aún) de horas docentes para el personal ANAC, la falta de autonomía para cualquier gestión/decisión/comunicación, la falta de redes sociales propias para difusión de cursos, la falta de estrategia de venta (promociones, descuentos, etc.); son algunos ejemplos de factores que dificultan el desarrollo del CIPE en un mercado en el que de esta manera resulta una hazaña mantener al Centro donde está”.
Remarca ATE que “debe quedar claro que si hoy el CIPE sigue en pie sin bajar estándares de capacitación es gracias a su gente. La misma que organizó en un esfuerzo titánico todo un mes de jornadas abiertas en la que invitó a escuelas, comunidad abierta e industria aeronáutica para tratar temas de interés social, cultural y aeronáutico. Lo que tuvo como intención poner en vidriera la capacidad que tiene el Instituto”.
Asimismo, agrega el comunicado, “lo que no es reconocido por esta Administración, nunca lo fue y ahora más que nunca están a las claras las intenciones: reducir el CIPE. Dejarlo a la deriva tratando de auto-sustentarse en un mercado competitivo luego de una crisis mundial producto de una pandemia que resintió gravemente la industria aerocomercial donde las posibilidades de tener alumnos/as externos/as es extremadamente limitada”.
Por último, para la ATE “resulta alarmante que se hable de prioridad a proveedores externos de capacitación teniendo dentro de la propia ANAC al CIPE, desaprovechando recursos del Estado que tan necesarios son en el CIPE, los aeropuertos del país y las regionales de la misma Autoridad Aeronáutica Argentina”.