La ATE- Entre Ríos se reunió en un plenario provincial
de trabajadores de salud mental, donde se discutió la problemática del sector y
se definieron los pasos a seguir, sumándose además a las medidas generales
dispuestas por el sindicato.
A través de un comunicado los trabajadores expresaron
lo siguiente:
“Nosotrxs lxs trabajadorxs de la salud mental de Entre
Ríos, reunidos en asamblea en la Asociación Trabajadores del Estado, queremos
expresar la profunda preocupación que sentimos ante los despidos de lxs
trabajadorxs de programas territoriales dependientes de la DNSMyA (Dirección
Nacional de Salud Mental y Adicciones) y ante la situación que atraviesa
nuestro sistema de salud pública.
Agravado aun más por la reciente degradación del
Ministerio de Salud Nacional a Secretaria, lo que constituye un retroceso
enorme por parte del estado y un recorte presupuestario que pone en riesgo la
salud de la población.
El momento actual que vivimos lxs trabajadorxs, nos
obliga a tener que organizarnos y manifestarnos para conservar los
puestos de trabajo de nuestrxs compañerxs, lo que atrasa aun mas las
posibilidades de discutir en cómo avanzar hacia una real implementación y
aplicación de la Ley Nacional de Salud Mental 26657 y nos sigue alejando de las
muchas situaciones que aún faltan resolver, como son, el Régimen Jurídico
Básico, las Orgánicas, el reconocimiento de las funciones, la capacitación al
personal, entre tantas otras. Cuestiones que ya se han vuelto un reclamo
histórico por parte de lxs trabajadorxs.
Como ya hemos dicho y volvemos a reiterar, no hay
políticas públicas de salud (m) que puedan ser efectivas si se pretenden llevar
adelante con trabajadorxs precarizadxs.
Creemos que la precarización de lxs trabajadorxs de la
salud (m) aleja toda posibilidad de implementación de la ley 26657, ya que la
misma plantea una modalidad de abordaje comunitario, integral,
interdisciplinario e intersectorial, centrado en la persona como sujeto de
derecho, con base en la atención primaria de salud, por lo que requiere,
necesariamente de recursos materiales y humanos, la articulación con efectores
del sistema de salud que deben trabajar en red, hospitales generales, centros
de día comunitarios, centros de salud, dispositivos integrados y articulados,
donde la persona asume un rol central como sujeto de derecho.
Hoy vivimos un contexto de ajuste, donde los servicios
de salud (m) deben afrontar la suba de las tarifas, los insumos y
los medicamentos, todo con el mismo presupuesto y donde lxs trabajadorxs
seguimos poniendo el hombro en defensa del sistema público de salud, aun con una
pérdida brutal del salario, elaborando nuevas formas de contención y
acompañamiento a lxs usuarixs, quienes también se ven afectados con esta
política, como lo demuestra el recorte de los programas de empleo laboral (PEL)
para lo cual solicitamos se haga efectivo el compromiso del ministerio de salud
de dar respuesta inmediata y de generar un programa provincial de
inclusión laboral para personas con vulnerabilidad psicosociales.
Es por esto que consideramos que en el fortalecimiento
de lxs trabajadorxs, se juega en gran medida la implementación de la ley
Nacional de Salud Mental y el sostenimiento de la salud pública.
Queremos un estado presente que garantice el acceso a
un servicio de salud de calidad, con personal capacitado, con las herramientas
necesarias y en condiciones dignas, que posibilite la
transformación de la salud hacia un modelo comunitario y de atención primaria.
En este contexto de ajuste permanente que plantea el
gobierno nacional, tomando a lxs trabajadores como una variable de
ajuste, la vida se vuelve un calvario y resulta imperiosa la defensa de la
fuente laboral de cada familia entrerriana.
Por último manifestar nuestro irrestricta defensa de
la caja de jubilaciones y de nuestro régimen jubilatorio, el cual lejos de ser
un privilegio, es un derecho de quienes trabajamos en el campo de salud mental.
Para hablar de privilegios lxs trabajadorxs podemos hacer una larga lista en la
cual nunca nos encontramos y en la que no queremos estar, simplemente nos
negamos a ser quienes paguemos este brutal ajuste.
Es por esto que planteamos una intervención urgente
por parte de los organismos provinciales que deben actuar en defensa de las
fuentes de trabajo y del sistema de salud.
Si se cumple con nuestros derechos como trabajadorxs y
como ciudadanxs, seguramente seguiremos poniendo el hombro con el
acompañamiento del estado. Sino, seguramente nos encontraran en la calle
peleando para que no sigan desmantelando nuestro sistema de salud”.
Plan de acción:
– Participar de la olla popular el 6/9 en el hospital
San Roque.
– Participar de la asamblea intersectorial el sábado
8/9 a las 17hs en la facultad de ciencias de la educación.
– Realizar el día 11/9 asambleas simultáneas en todos
los servicios de salud mental de la provincia, exigiendo la reincorporación de
las trabajadoras despedidas. En Paraná movilizarnos a la dirección de salud
mental de la provincia para entregar un petitorio de regulación de la situación
de las compañeras despedidas.
– Convocar y participar del paro y movilización del
día 12/9.